Columnas
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Tragedias evitables
Estarán ustedes conmigo en que la mayoría de las catástrofes que conmueven los cimientos de nuestra fibra sensible son casi…
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No se os puede dejar solos
Ruego me perdonen el título de la columna, que tanto recuerda al General Ísimo, pero no se me ocurre una…
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Música y lágrimas
Lo escuché muchas veces en mi infancia. Aún lo escucho. En vinilo. Era uno de sus discos preferidos porque era…
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Cuestión de magia
Abandonad toda esperanza, salmo 375ºVolvemos de las vacaciones, y no les pondré en un compromiso preguntándoles si leyeron algo de…
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Mi vida es un ahogado zumbido interior en medio del silencio de la noche
Llego al edificio a las doce de la noche. Me cambio de ropa en el cuarto de limpieza. Preparo el…
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La política del vacío
Es miércoles ya, setenta y un minutos de miércoles, y yo todavía sentado en medio del despacho azul, con los…
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Carta a unos listillos de los cojones
Desde hace días no se escribe ni se habla de otra cosa en los medios, desde los más conservadores hasta…
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Crónicas de un pueblo
A principios de los setenta todos vivimos en Castilla, concretamente en Puebla Nueva del Rey Sancho. Allí habitamos casi tres…
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La segunda oreja
Es habitual que los tendidos de una plaza de toros se llenen puntual y circunstancialmente de espectadores que carecen de…
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Deberes
Abandonad toda esperanza, salmo 374ºDado que la semana próxima no hay edición impresa de EPDV y que voy a estar…
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