Cosas a las que nadie se termina de acostumbrar
No nos llegan más que aparentes buenas noticias sobre proyectos futuros o sobre pequeñas actuaciones de carácter mundano…
Me levanto de la cama, desayuno, salgo a la calle y hojeo un periódico que encuentro en la barra de un bar, contengo el aliento, abro una página al azar y leo: “La provincia de Alicante, casi sin riesgo de sufrir un maremoto destructor”. Tranquilizado de forma apreciable suelto al fin el aire de los pulmones. Es un buen modo de comenzar el día.
En realidad no, porque por vicio ya he visto las noticias en la televisión: “El Parlamento Europeo aprueba incluir la violencia de género como eurodelito”. A priori diría que también es una buena noticia. Pero tiene sus “peros”: 427 votos a favor, 119 en contra y 140 abstenciones, con la abstención de casi todo nuestro PP, salvo por el voto en contra de una diputada que, como el grupo de VOX, ha votado en contra. Eso es lo que tenemos en España.
En cualquier caso, como es temprano, intento mantener la mente limpia para pensar lo que voy a escribir esta semana sobre nuestra querida ciudad. Hay unos cuantos temas relevantes sobre los que no nos informa el alcalde en su red social, como la cuestión del nuevo horario de bibliotecas donde no se incluye el Punto de Lectura del Barrio San Francisco. Y ya sé, como ustedes, queridas personas, que en los movimientos de educación social, desde sus inicios, los referentes en cuanto a resultados positivos, a lo largo y ancho de todo este planeta, pasan por pequeñas bibliotecas o centros sociales ubicados en las zonas oportunas. No se entiende así aquí y parece que es difícil hacerlo entender.
Tampoco parece tener mucho calado en el consistorio la reclamación sobre la obligada transparencia, ya que se obvia el tema mientras que se nos continúa obligando a pasar por ese calvario tan parecido al juego del buscaminas cada vez que hemos de buscar información en la web municipal o cada vez que debemos realizar trámites que ya exclusivamente se realizan por estos medios.
Pero si nos centramos en la cuestión informativa entre la administración y la ciudadanía, pese al duplicado de noticias oficiales que realiza nuestro alcalde, encontramos que no nos llegan más que aparentes buenas noticias sobre proyectos futuros, o sobre pequeñas actuaciones de carácter mundano.
Tendríamos entonces, para enterarnos de algo, que atender a las críticas de la oposición, y nos encontramos con las quejas sobre la red de agua y alcantarillado, basadas en un informe de 2021; como si el popular partido que vierte las críticas no se hubiera enterado hasta ahora del estropicio. Quiero decir, que no solo son cosas que no se hacen de un día para otro, sino que además hace ya cuatro años que el popular partido firmó un pacto de compromiso en tal materia (sino que además se han ido abordando estos millonarios proyectos estos pasados años, y que anteayer se anunció una nueva e inminente intervención al respecto).
En fin, diría que todavía es verano y yo mismo, como los partidos políticos, andamos a tontas y a locas. El problema reside en que, si bien yo acabo de recomenzar este baile semanal de palabras, los asuntos políticos, covid mediante y así a lo grueso, todavía arrastran año y medio de calentamiento y flema.
Estimado Andrés.
Te preocupa que el PP se abstenga?
Que Vox voté en contra?
O que alguien gocé de la libertad de pensar y votar según le venga en gana?