El ayuntamiento da el visto bueno a la demolición de los Peones Camineros
Comienza el proceso de expropiaciones para llevar a cabo la actuación que permitirá eliminar el paso a nivel de Los Piratas
El Pleno ordinario de abril, último de la legislatura, aprobará varias mociones de la concejalía de Urbanismo que suponen “cerrar temas en los que hemos venido trabajando durante toda la legislatura”, explicaba Cate Hernández.
El primero de ellos tiene que ver con el derribo de las viviendas de los Peones Camineros. Aunque el ayuntamiento intentó en su momento que sus propietarios (Ministerio y Generalitat) pudieran financiar su rehabilitación para darles uso como vivienda social, ambas administraciones rechazaron dicha propuesta. Por ello, se ha optado por derribar todos los bloques (un total de 20 viviendas) y poder dar otros usos a ese suelo, entre los que se podría encontrar la construcción de un nuevo Palacio de Justicia en Villena.
BOREAL PODRÁ LLEVAR A CABO SU ROCÓDROMO. Por otro lado, la edil de Urbanismo informaba sobre la realización, por primera vez en la historia del ayuntamiento, de un expediente de deslinde de un camino público que permitirá a la empresa Boreal llevar a cabo la construcción de un gran rocódromo.
Se trata de un camino público que quedó en medio de las parcelas de Boreal y Seher, explicaba la edil, y “como el PGOU ya contempla una conexión alternativa amplia, ese camino no tiene sentido, por lo que entendemos que se puede regularizar la situación de toda la zona y registrarla tras las modificaciones oportunas, cuyos estudios han sido financiados por las propias empresas, que es de quienes parte la iniciativa”, explicaba.
“Pensamos que es beneficioso tanto para el ayuntamiento, que regulariza la situación y gana un terreno que podrá vender o permutar en un futuro, como para las empresas, que ven legalizada totalmente la zona y, en el caso de Boreal, consigue sacar adelante un proyecto que puede atraer a mucha gente a nuestra ciudad”, concluía la edil
EXPROPIACIONES EN ROSALÍA DE CASTRO. Por último, el Pleno, a petición de la Generalitat, dará el visto bueno al inicio del expediente para llevar a cabo las expropiaciones necesarias para la supresión del paso a nivel de Los Piratas y la reurbanización de la calle Rosalía de Castro. Anunciada hace unos meses, la actuación permitirá acabar con dicho paso a nivel y suprimirá la barrera de las vías facilitando un paso subterráneo tanto para vehículos como para peatones, además de modificar urbanísticamente toda la zona.
El expediente de expropiación debe estar concluido en diciembre de este mismo año, por lo que el ayuntamiento, a instancias de Valencia, pone ya toda la maquinaria administrativa en marcha. La Generalitat asumirá el pago de las expropiaciones de terrenos rústicos y el ayuntamiento deberá hacer frente a los terrenos urbanizables, cuyo coste se estima en 800.000 euros, “que recuperaremos cuando se lleve a cabo el proyecto de reurbanización en Rosalía de Castro, donde hay promotores interesados en llevar a cabo varias inversiones”, decía Cate Hernández.
Por fin, viva, viva, los Peones Camineros se derribarán. Entiendo que ahora el Ayuntamiento, ya que el terreno es «suyo» lo destinará en tanto no tenga otro uso a aparcamiento público, ya que últimamente se ha dedicado a «cerrar» todos los que habían por el centro, de tal manera que dejará abierto éste para que todos los compradores de fuera de Villena cuando vengan a comprar a Villena dejen su coche aparcado allí y haciendo uso del autobús urbano (que entiendo que se lo facilitará GRATUITAMENTE), podrán moverse por Villena sin problema alguno. 🙂 🙂 🙂
Somos el país del derroche, llegar a la situación de tener que demoler 20 viviendas porque la administración central y autonómica han sido incapaces de ponerse de acuerdo es vergonzoso. Cabe recordar que estas viviendas fueron rehabilitadas por el Ministerio del Interior, pero la falta de entendimiento entre administraciones no permitió que pudieran ocuparse. Da pena verlas destrozadas, con la falta que le hace una vivienda digna a tanta gente. Pero sobretodo da rabia comprobar cómo se malgasta el dinero y el patrimonio de todos.