Escena 1
- Con la cantidad de grupos locales que se están comiendo los mocos con esto del Covid, no entiendo cómo habéis tenido los santos huevos de traer a Camela, la verdad.
- ¡Ya está el alcalde con sus idas de olla!
- ¡Ni idas de olla ni nada parecido, Andrés! Y los Sidecars esos que no dan ni pena. Esta vez, os habéis lucido.
- Son el grupo de moda.
- Supongo que estás hartito de oírlos, Juan José.
- Teníamos un compromiso firme con la promotora y…
- ¿Y qué? ¿Sabes qué porcentaje de grupos catalanes actúan en el Primavera Sound?
- ¿Te vas a hacer indepe ahora?
- Ganas no me faltan: en el 2015, el último año en que estuve, actuaron cuarenta grupos catalanes en el Primavera Sound. Eso es apoyar lo propio, no traer a Sidecars y no negociar, ni siquiera, que algún grupo de aquí los pueda telonear. ¡Luego nos quejamos de que la gente no compra en los comercios locales!
- ¿Y quién iba a querer telonear a esos?
- Con permiso, señor alcalde…
- Pase, pase, Avelino.
- Disculpe que les moleste, pero ha llegado este paquete para usted.
- ¿Has pedido algo a Amazon?
- No tiene remitente…
- ¡Ábrelo!
- Mira que eres cotilla, Andrés.
- ¡Hostia! ¡Tres cartuchos de escopeta y una pen drive!
- ¿Llamo a la Guardia Civil o lo meto en el ordenador?
- Desconecta internet y pásale el antivirus.
- ¿Lo vemos?
Escena 2
- ¡Alcalde de mierda, te vamos a volar los putos sesos!
- ¡Que tú no nos conoces, que estamos mu locos!
- ¿Cómo nos va a conocer, si vamos encapuchaos?
- … encapuchaos… ¿las medias de rejilla valen como capucha?
- ¡Los jodidos chinos, que no traen nada más que mierda en los bazares!
- Bueno, eso y que no tenemos ni idea de medias, porque las podíamos haber cogido de una pierna, que parecemos fraggles, tío.
- La culpa la tienen los putos rojos, que han permitido que los inmigrantes monten tiendas.
- Tienes razón: alcalde, hijo de puta, te vamos a volar los huevos de una perdigonada…
- ¡Que tú no nos conoces, que estamos mu locos!
- ¡Pero que mu locos!
- ¡Y somos chungos!
- ¡Mucho!
- Somos tan chungos que estamos mu locos.
- ¡Somos chungos como los higos!
- ¿Los higos?
- Claro, tío: los higos chungos.
- ¡Hostia! Jajajajajaja ¡Qué cabrón!
- Somos tan chungos que decimos “hostia puta”.
- Y nos cagamos en Dios a puñaos…
- Eso sí: si pillamos a un rojo de mierda metiéndose con la Iglesia, le borramos la boca a hostias.
- Que a los chungos como nosotros, lo que nos gusta es dar buenas hostias.
- Somos chungos de verdad, sí…
- Y nos cagamos en el Fernando nosequé ese, el de las cejas p’arriba.
- En Nochevieja nos juntamos dieciséis en casa del Rober y no pasó na de na.
- Eso del coronavirus es un puto invento de los venezolanos pa controlar el mundo.
- ¡Y de los chinos!
- Sí tío, los chinos son lo peor…
- Los únicos chinos que molan son el Bruce Lee y el Yackie Chang.
- A los demás, se los tenían que haber cargao los alemanes.
- ¿Esos no se cargaron a los judíos?
- Pues se tenían que haber limpiao también a los chinos.
- Creo que nos estamos dispersando…
- ¡Es verdad!
- ¡Alcalde, te vamos a pegar dos perdigonás en la puta cabeza!
- ¡Que somos chungos y dispersos!
- ¡Eso! Somos mu chungos y mu dispersos, ¿qué pasa?
- Te vamos a reventar, rojo de mierda.
- Somos tan chungos que, a nuestro lao, el demonio es Marcelino Pan y Vino.
- ¡Somos unos demoñios!
- Demonios.
- Demoñios.
- Demonios.
- Demo… chungos, somos mu chungos.
- Chunguísimos.
- Chunguisisisisísimos.
- ¡Tú no nos conoces, tío!
- Somos tan chungos que no reciclamos.
- ¡Reciclar es de rojos de mierda!
- Es más, metemos los cascos de las litronas en el contenedor del plástico.
- Somos unos tíos mu duros.
- Duros de pelar, duros de pelaaaaaar.
- ¡Tío! ¡No nos dispersemos! ¡Déjate a la Rebeca ahora!
- Es que es un temazo de la hostia, tío.
- ¡Y la Rebeca está taco de buena, tío!
- ¡Menudas mamellas se calza!
- ¡Cuidao, que nos dispersamos!
- ¡Somos dispersos y chungos!
- Mu chungos, tío.
- Somos tan chungos que nos tiramos del andamio de palillo.
- ¡Sin taparnos la nariz ni na!
- Y nos saltamos los semáforos porque se ponen en rojo…
- Solo queremos el rojo en la bandera de España.
- Somos mu chungos, tío.
- Somos tan chungos que nos afeitamos la cabeza en casa pa no matar al barbero con su propia navaja.
- Y nos pasamos el confinamiento por el forro de los güevoh, tío.
- ¡Fumamos pa no ponernos la puta mascarilla!
- Y, cuando nos la ponemos, usamos las gafas de sol pa que se nos empañen, porque somos unos tíos mu duros.
- Somos más duros que la picha de un ogro.
- Duro de pelar, duro de pelaaaaaaaaaaaaaarrrrrrr.
- ¡Tío! ¿Quieres dejar ya eso?
- Es que la tengo metía en la almendra, tío…
- Que nos dispersamos, tío…
- Bueno, pues eso: que te vamos a reventar los morros, alcalde de mierda.
- ¡Que estamos mu locos!
- ¡Y somos mu chungos, tío!
- Y a los rojos como tú les hacemos tragar los dientes de golpe.
- Las vas a pasar putas, por anti-español.
- ¡Que somos mu españoles, no como vosotros, rojos de mierda.
- Por cierto, vaya tatuaje guapo se ha hecho el Branquias…
- ¿Qué se ha puesto ahora?
- Una cabeza de águila así de lao, con una esváltica en el ojo.
- Exvartida.
- Elvártida…
- … cruz de los nazis.
- ¡Dobein! ¡Qué guapo, tío!
Escena 3
- ¡Madre mía, menudo par de cromos! Definitivamente, España es diferente.
- De aquellos polvos, estos lodos…
- Estás muy callado, alcalde.
- Estoy inquieto.
- Sí, es inquietante.