La mascarilla será obligatoria para entrar en Consum
La empresa prevé poner esta medida de seguridad en marcha a partir del 18 de mayo
La cadena valenciana de supermercados Consum, con dos establecimientos en Villena, ha anunciado que a partir del 18 de mayo será obligatorio el uso de mascarillas a la hora de acceder a hacer la compra dentro de sus establecimientos. En algunas de las tiendas de Consum ya es visible el mensaje en el que anuncia el nuevo requisito.
Paralelamente, Consum anunció la semana pasada que se suma a la apuesta de la gran distribución por la venta de mascarillas, en la que también están el resto de grandes operadores del sector, como Mercadona, El Corte Inglés o Carrefour.
En su caso, la cooperativa ha apostado por un hecho diferencial: su producto está "fet a València". Para lanzar este producto, la firma alimentaria se ha apoyado en Comersan, una compañía textil con base en Cocentaina especializada en el producto para hotelería, restauración, tapicería o ropa de hogar.
Se trata de una firma con un importante desarrollo tecnológico que, al igual que otras empresas del clúster textil radicado en la Vall d'Albaida, El Comtat o l'Alcoià, ha reorientado su producción para producir en masa este producto. La producción de mascarillas, batas y otros productos, de hecho, ha reducido el impacto de los ERTE en este sector.
El producto que va a comercializar desde ahora Consum, además, es "sostenible", apuntan fuentes de la cooperativa. Será un paquete de cinco mascarillas lavables y reutilizables, a un precio de 9,95 euros.
5 mascarillas a casi 10 euros???
Son casi 2€ por mascarilla… ¿No estaban limitadas a 0,96€?
Las mascarillas quirúrgicas de un solo uso que venden en las farmacias están limitadas a 0,96€. Estas son lavables y reutilizables, así que las pueden vender al precio que quieran. Además, ahora casi todo el mundo tiene mascarillas, el problema es que hay gente que no se las quiere poner. Y si no se las ponen por la calle no se puede hacer nada, pero no se puede consentir que no las lleven en un supermercado o en cualquier otro establecimiento. Al hablar se expulsan gotitas de saliva, que pueden caer sobre cualquier superficie o artículo del establecimiento, que luego otras personas van a tocar o a coger.