La Navidad más triste en el centro sociosanitario La Morenica

El covid se ha vuelto a colar en el centro sociosanitario La Morenica, y lo ha hecho en el peor momento posible, justo en vísperas de Navidad y cuando residentes y familias ansiaban poder compartir estas fechas tan entrañables.

Se trata de un caso algo rocambolesco: la pareja de una trabajadora del centro dio positivo, pero a ella no se le obligó a guardar cuarentena, tal y como indica Sanidad desde hace meses, por lo que debió seguir trabajando.

Pese a ello, desde el centro se le trasladó de forma preventiva a otras labores, sin contacto con los internos, pero finalmente ha acabado dando positivo, sin afectar a residente alguno, entre los que no hay ningún positivo y todos se encuentran bien, tal y como ha confirmado el propio centro.

Sin embargo, el simple hecho de contar con un positivo ha llevado a Salud Pública a decretar brote por Covid-19 en la residencia, lo que, en aplicación de la normativa vigente, implica un aislamiento preventivo que conlleva la suspensión de visitas y bajas, así como de cualquier tipo de salida, hasta nueva orden.

En comunicación con las familias de los residentes, el centro ha pedido comprensión y apoyo y asegura que intentará “generar un ambiente de paz e ilusión para que estos días festivos sean lo más navideños posibles”, siendo conscientes de que “en las fechas que se aproximan es difícil no poder estar cerca de las personas queridas”.

Tristeza, rabia, enfado…

La noticia ha caído como un jarro de agua fría entre los familiares de los residentes, muchos de los cuales ya tenían programadas sus salidas para pasar las navidades junto a sus familias, en algunos casos hasta Reyes, en otros al menos los días de Nochebuena y Navidad.



Tras no poder salir las pasadas Navidades había muchísima ilusión por volver a vivir este año las fiestas en familia, por lo que el malestar es evidente entre las familias consultadas por EPdV, que asumen con resignación y tristeza la situación y eximen de responsabilidad al centro, “que está gestionando la situación lo mejor posible y trata siempre con cariño a los residentes”.

No obstante, hay incomprensión con la normativa de Conselleria. “Los colegios abiertos y llenos de brotes, los eventos deportivos llenos, las calles a reventar de gente… y por un caso controlado nos quedamos, por segundo año, sin poder pasar la Navidad con nuestros familiares”, señalan desde algunas familias, que pensaban que “este año, con las tres vacunas puestas, más la de la gripe, íbamos a poder disfrutar las Navidades como Dios manda, pero parece que hemos vuelto a la casilla de salida”, concluyen con tristeza.