Salud

Nuestro “Cuento de Navidad” desde la UCA de Villena

“Honraré la Navidad en mi corazón y procuraré conservarla durante todo el año”. Charles Dickens (1812-1870)

Sí, efectivamente nos vamos a apoyar en la novela corta de Charles Dickens, Cuento de Navidad (A Christmas Carol ,1843), para detallar cómo en la atención de nuestra Unidad introducimos como metáforas, diferentes escenas de los capítulos del libro anteriormente mencionado y cómo su autor trabajó la problemática social de su época.

El eje central del argumento, es el cambio de actitud interior de Ebenezer Scrooge mediante la visita de los fantasmas del pasado, del presente y del futuro el día de Nochebuena. No somos en sí “Scrooges” pero sí nos encontramos en muchos momentos en ese punto de no empatía y de no prestar atención al dolor que podemos ocasionar en los otros. Especialmente, cuando personas cercanas, familiares o amigos sufren por los problemas de adicción.

Todos tenemos nuestros recuerdos del pasado. Es ahí donde figuran los errores cometidos en el debe y muchos aciertos en el haber. Sin embargo, terminamos analizando sin profundidad esos errores, además de disfrazarlos de culpabilidad y evitando ese sincero trabajo interior. El pasado se observa con la luz del pasado y siendo conscientes de que esas decisiones se tomaron en unas circunstancias que no son las del presente. Forman parte de nuestra “autopsia biográfica”, aconsejable en algún momento de nuestra vida.

Nuestro fantasma del presente viene para invitarnos a la reflexión de todos nuestros proyectos y a hacernos ver cómo estamos manejando los mismos, y funcionando en cada uno de ellos. Posiblemente veamos que mezclamos unos con otros y no “buceamos” en el análisis objetivo. Es por ello por lo que necesitamos parar, pensar y observar. En estos casos, ser autocompasivos con nosotros mismos es una buena herramienta de trabajo.

Y nuestros fantasmas del futuro… ¿A quién no se le ha aparecido el suyo? Es muy fácil pedir a los demás que no se marchen mentalmente hacia adelante en el tiempo, aunque sea imposible saber qué nos va a traer la vida ni siquiera hoy mismo. Pero sí es totalmente posible ver con nuestro fantasma del futuro lo que va a suceder si nos mantenemos en la misma línea. Indubitadamente, se repetirán los mismos errores una y otra vez, multiplicando el sufrimiento personal, hacia uno mismo y los demás.

Es por ello por lo que, aprovechando la metáfora del cuento, intentamos llevar a cabo una parada reflexiva en el tiempo y forma de la persona, a fin de establecer ese cambio de actitud. Desde ese planteamiento, orientamos a la persona a poder ser capaz de mejorar, cambiar, modificar proyectos, o tal vez, de cerrar definitivamente los que no tienen ningún viso de solución.

Desde esta Uca os deseamos que este tiempo de Navidad se prolongue durante todo el año como orientación permanente, para lograr mejorar el presente desde el interior de cada persona y alcanzar un mejor futuro para todos.

Feliz Navidad y los mejores deseos para el nuevo año. Gracias.

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