Partido Popular: “Villena votó cambio, pero el PSOE decidió que todo siguiese igual”

La crisis derivada de la Pandemia de COVID-19 ha sido tan intensa que parece sumamente lejano aquel 26 de mayo de 2019 en el que el Partido Popular, pese a los malos resultados que obtenía en nuestra ciudad en las elecciones nacionales, autonómicas y europeas logró la confianza mayoritaria de villeneros (respecto a las elecciones nacionales, el PP de Villena aumentó los apoyos en 1.600 votos, el PSOE bajó 1.200 y Ciudadanos 2.600) y su candidato,  Pepe Hernández, se convirtió en el candidato más votado por nuestros vecinos para ser el alcalde de Villena.

Sin embargo, un pacto entre los mismos actores que han gobernado nuestra ciudad los últimos 8 años no le permitía el acceso a la alcaldía. Villena votó cambio -quienes gobernaban hasta ese momento con mayoría absoluta perdieron más de la mitad de los apoyos- pero el PSOE decidió que todo siguiese igual.

El proyecto de Pepe Hernández no proponía un programa electoral, sino de un Plan Estratégico de futuro. Un plan con más de 180 medidas para dar a Villena un giro de 180 grados.  En la presentación de este Plan, Pepe Hernández, como vecino preocupado que nunca antes había estado en política, decía que “Villena no puede permitirse un debate distinto al de analizar cómo vamos a solucionar los problemas a los que se enfrenta nuestra ciudad y cómo vamos a darle a Villena el cambio que necesita”.

La prioridad de aquella estrategia era un Plan de Reactivación y Desarrollo Económico basado en 4 pilares: promoción, ayudas, colaboración y formación e innovación con medidas como ampliación del suelo industrial con la actualización del PGOU, bajada de IBI y tasas municipales que graven actividades económicas, desarrollo del área logística del Puerto Seco, dinamización de la Plaza y del centro comercial abierto además de continuar con el proyecto de reurbanización y revitalización el Eje Comercial, etc. Decíamos que nuestra ciudad no podía permitirse el lujo de ir hablando siempre del pasado, sino  que debíamos mirar desafiante al futuro.

Si esto es lo que creíamos que Villena necesitaba hace un año (además de muchos más aspectos que, por razones obvias de espacio, no podemos reproducir aquí), ahora, con esta nueva situación, con mucho más fundamento lo reivindicamos como la máxima prioridad: la reactivación y el desarrollo económico de nuestra ciudad para dar oportunidad a los jóvenes, para evitar que se convierta en una ciudad dormitorio, para proteger su comercio y ampliar su industria que genere empleo, que es la mejor política social. Aquel proyecto que presentamos a las elecciones tenía unos cimientos muy sólidos, en base a los cuales se ha afrontado esta crisis, proponiendo desde el PP un Plan de Estímulo y Desarrollo de la economía local basa- do en los mismos principios y con el mismo espíritu.



Desde el primer momento hemos asumido nuestro papel de oposición intentando sacar lo mejor para nuestra ciudad, no quedándonos en la mera crítica, que en ocasiones es necesaria cuando se hace algo que no consideramos correcto pero siempre ofreciendo alternativas e intentando que nuestro proyecto de ciudad se lleve a cabo porque entendemos que es lo que Villena necesita, como el tan demandado Puerto Seco, impulsado por el Partido Popular cuando gobernó, e impulsado de nuevo en el mes de diciembre por nuestro partido desde la oposición.

Es pronto para hacer el balance de un Gobierno en su primer año, pero con estas breves pinceladas, podemos concluir que nos parece un error que el Gobierno ya haya renunciado a actualizar el desfasado PGOU, que tanto decían ellos mismos en campaña que había que modificar -pero mucho ha cambiado el PSOE de la oposición al Gobierno- quedándonos de nuevo en políticas cortoplacistas que piensan más en las próximas elecciones, que en las próximas generaciones, o que no hayan publicado su programa de gobierno para los próximos cuatro años argumentando el propio alcalde el pacto se irá plasmando cada año en el Presupuesto, demostrando la carencia de proyecto, que la improvisación va a seguir siendo la tónica y que el futuro de Villena dependerá del tira y afloja que mantendrán Verdes y PSOE cada año en la negociación de cada presupuesto y demostrando, también, que el único pacto al que llegaron hace un año, fue el del reparto de los sillones y el resto ya lo irían viendo.

A parte de eso los clubes deportivos y asociaciones de nuestra ciudad siguen sin cobrar;  el presupuesto no se ha aprobado hasta que ha transcurrido medio año de 2020 (no se había presentado siquiera en marzo, antes de la Pandemia y seguíamos con el de 2017 prorrogado); hemos seguido perdiendo subvenciones; no se ha iniciado ninguna ampliación o arreglo de las actuaciones en instalaciones deportivas del Plan Director y tenemos un equipo de Gobierno instalado en el propagandismo al que le cuesta tomar decisiones, le cuesta asumir responsabilidades, buscando siempre culpables de sus propios errores y le cuesta mucho más ser transparente, dialogar y negociar con el resto de partidos del Ayuntamiento; es decir,  que un año después,  todo sigue igual.



En la investidura, hace un año, pedimos al Equipo de Gobierno que, aunque eran los mismos actores, cambiasen las formas de actuar que tan malos resultados habían dado a Villena en 8 años. A nuestro pesar, comprobamos que esto no ha ocurrido.

Desde el primer momento, dijimos que si este Equipo de Gobierno comenzaba a trazar  una Villena de futuro alejada de la improvisación y el cortoplacismo, nos tendrían al lado, si no  nos tendría enfrente; y lo hemos demostrado, apoyando lo que considerábamos positivo para nuestra ciudad, y criticando y proponiendo mejoras para lo negativo. Incluso hemos apoyado unos Presupuestos por la emergencia a la que se enfrenta Villena y la necesidad de un presupuesto consiguiendo a cambio el compromiso del Equipo de Gobierno de pactar una modific ción de crédito para adaptarlo a la nueva situación durante el verano.

Esta ha sido la tónica del PP en este primer año, intentar mejorar Villena desde donde sea, Gobierno u oposición, con propuestas, alternativas e intentando corregir lo que creemos que no  es positivo, poniéndonos al lado del Equipo de Gobierno para reivindicar y defender los intereses de nuestra ciudad cuando hemos tenido que hacerlo, sin siglas de por medio. Para eso entramos en política, y para eso nos afiliamos al Partido Popular: para hacer de Villena, una ciudad mejor.