Cartas al Director

Plaza de Toros de Villena: Basta de engaños. ¡Que no te topen!

Escribimos este artículo porque día a día vemos cómo se nos intenta hacer ver a los ciudadanos que restaurar la Plaza de Toros de Villena es, de cara al futuro, rentable económica y culturalmente y respetable hacia nuestros antepasados. Vemos y escuchamos a varios Sres. de la Peña Taurina vaticinar un caos cuando el actual Equipo de Gobierno trata de cumplir una promesa electoral convirtiendo un espacio en ruinas, público y céntrico, en un espacio de ocio y cultura para toda la ciudadanía en general.
La diferencia entre los que pensamos por los ciudadanos y los que sólo piensan en ver, de forma inmoral, el derroche innecesario de sangre de seis toros una vez al año, es que un Centro de Ocio, conforme se plantea actualmente, tendría un coste para los ciudadanos de 0 euros, mientras que restaurar un edificio que está en ruinas costaría alrededor de los 1.000 millones de las antiguas pesetas. Sí, una cifra incomprensible para las arcas municipales. Aunque para algunos, mientras haya una corrida de toros al año… Y sobre todo, no se crean que la Diputación tiene ese dinero guardado para tal restauración, cuando apenas ha sido capaz de poner 50 millones de pesetas para el derribo de los anexos al Museo Etnográfico Jerónimo Férriz.

Pero claro, enseguida nos venden que si la historia, que si el respeto a aquellas personas que con su sudor y dinero levantaron tal imperio… Díos mío, pero qué estamos planteando, nos preguntamos. ¿Tan insensatos y tan malas personas somos? ¿Tan sinvergüenzas somos, como algunos nos llaman? Y claro, nos paramos y pensamos; ¡Algo falla en este sistema! ¡No avanzamos en Villena! Pero, ¿cómo vamos a avanzar en Villena habiendo pensamientos tan retraídos como los que se plantean con este tema?

Cuando hablan (la Peña Taurina y oposición) de una plaza plurifuncional y cubierta, donde todas las semanas se podrían realizar espectáculos para así amortizar el coste de la misma, o bien no saben lo que dicen o bien se creen que somos ignorantes, cuando de bien es sabido por todos que ni Elda, ni Caudete ni el mismo Alicante, es capaz de realizar eventos de cualquier tipo, ya sea semanal o incluso mensualmente, para sacarle un rendimiento asequible y rentable para cualquier empresario que quiera meter la cabeza en tal proyecto. Porque claro, esa es otra: ¿Qué empresario está dispuesto a realizar tanto espectáculo todos o casi todos los fines de semana? Se lo decimos nosotros: de la forma que ustedes plantean el macroproyecto de restauración, nadie.

¡No nos quieran vender que ustedes quieren un centro plurifuncional para todos, respetando a nuestros antepasados, cuando en realidad lo único que les importa y quieren es poder disfrutar de una corrida de toros al año! Todavía recordamos el comentario que algún iluminado expuso: ¡La Copa Davis en Villena! En fin, el derecho a soñar es libre.

Miren, el otro día nos desplazamos hasta la localidad de Onteniente, ciudad muy similar a Villena; nos desplazamos con el propósito de ver con nuestros propios ojos el gran Centro Comercial (El Teler) que acaba de ser inaugurado. Y no piensen que lo han construido en ningún polígono industrial ni en las afueras, no. Está construido en el centro de Onteniente, junto al casco histórico. Accesible para todo el mundo, céntrico, para que las personas no tengan que desplazarse en coche para ir al cine, tomarse un helado o estar en la bolera. En definitiva, que poco a poco el concepto de “los centros comerciales tienen que estar en las afueras” va cambiando.

Pero lo más lamentable de todo esto es que en Villena todavía hay alguna persona que cree que pensar en lo que otras localidades han sido capaces de implantar, un Centro Comercial en el centro, es de locos, de insensatos y, si encima pensamos que es posible recuperar sin coste económico alguno para el ciudadano un espacio público y que actualmente es una ruina para convertirlo en un espacio de ocio y cultura abierto los 365 días del año, es que somos unos destructores del pasado, de los sentimientos de nuestros abuelos, de no saber lo que decimos ni planteamos. y lo peor de todo es que somos receptores incluso de insultos y amenazas personales por defender unas ideas tan respetables como cualquiera otras.

Concluyendo, hacemos un llamamiento a la reflexión y seriedad por parte de aquellos que sólo quieren enterrar el futuro de Villena para que no sean tan egoístas con la sociedad Villenense; y a todas aquellas personas que son engañadas con “palabras bonitas y sentimentales” les decimos que se paren a pensar tan solo un minuto y que sopesen ambas soluciones: Restauración o Centro de Ocio; la primera para darle el gusto a unos cuantos y dejar las arcas municipales temblando, o la segunda, para que el futuro de Villena vea cada día un poco mas la luz y ese problema que siempre ha existido, como es el dicho “¡Es que no tenemos donde ir!”, sea algún día una frase totalmente obsoleta. ¡Progresemos de una vez y seamos valientes con decisiones firmes! ¡Que no te topen más!

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