En estos tiempos de influencers, youtubers e instagramers en los que freak y creepy parecen ser solo dos anglicismos más que han recuperado su significado original y se utilizan para estigmatizar a según qué personas, y cuando el único Quevedo que conoce la mayor parte de la sociedad española es un cantante (sic), organizar un evento dedicado al cine y la historieta de terror donde lo más moderno que se analizará será una película de mediados de los años ochenta, o escribir y dibujar un cómic biográfico sobre el autor de El Buscón, son algo a lo que solo se atreven quienes van a contracorriente del pensamiento único y saben valorar el legado que nos dejaron aquellos que llevan ya muchos años, o incluso siglos, criando malvas. Gente muerta, que dirían algunos de mis alumnos, vaya.
Quien firma estas líneas no es el responsable directo de ninguna de estas dos cosas, pero sí participo en un par de actos relacionados con ellas... y procedo a contárselo todo con pelos y señales y de paso les invito cordialmente a que asistan a ambos encuentros. El primero de ellos tendrá lugar mañana sábado a las seis de la tarde en la librería Ateneo Comics de Alicante, y será la presentación en sociedad de Quevedo, un estupendo cómic biográfico sobre esta figura fundamental de las letras hispanas. Yo tendré el honor de conducir el acto, que contará con la presencia de sus dos autores: el guionista Pablo Durà y el dibujante Jaime Martínez. Se da la curiosa circunstancia de que ya he presentado con anterioridad a ambos, aunque por separado; y en el caso del primero, me une a él una relación de amistad que empezó más de veinte años atrás y que siempre ha estado vinculada al noveno arte. Tanto es así que, una vez él abandonó las filas del Unicómic que ayudó (y mucho) a crear, he podido ser testigo de su crecimiento profesional como escritor de historietas, en un proceso que ha llegado a pasar por Marvel (un hito histórico dadas las reticencias de la compañía a contratar a escritores foráneos) y que nos ha dejado una obra tan interesante como La Brigada Lincoln.
Así pues, además de un honor será un verdadero placer departir en público con Pablo; y también con Jaime Martínez, que después de llevar al mundo de las viñetas las aventuras televisivas de El Ministerio del Tiempo materializa aquí (con la colaboración de Angie Suárez al color) las palabras de su colega recreando fielmente la España de finales del siglo XVI y comienzos del XVII. De esta forma, ambos autores acaban construyendo una muy recomendable novela gráfica sobre quien fue (junto con Cervantes, su amigo Lope y su rival Góngora) el escritor más importante del Siglo de Oro español; una controvertida figura que queda retratada en sus páginas como el personaje complejo que fue: escritor y poeta, sí, pero también caballero de la Orden de Santiago, espía a las órdenes del conde de Osuna, mujeriego y pendenciero, antisemita confeso y polemista en general. Les aseguro que, en la actualidad, las tertulias televisivas se lo rifarían; y él entraría al trapo.
Menos de una semana después, el jueves 2 de noviembre, arranca la tercera edición de Fotograma Rojo, que vuelve a celebrarse en el Centro Cultural Las Cigarreras una vez más bajo la dirección del autor de cómics Adrián Bago. Si en la primera edición ya hubo un pequeño hueco para el cómic y en la segunda se optó por que el cine copara la programación casi al completo, es de esperar que en esta tercera convocatoria se vuelva a hablar de tebeos gracias a la presencia del especialista y divulgador Pedro Porcel, que después de dos volúmenes previos dedicados al medio como Tragados por el abismo y Superhombres ibéricos acaba de publicar el también indispensable Viñetas infernales. Cien años de cómics de terror... El cual, dado el interés que ha despertado, ya cuenta con una segunda edición recién salida del horno (infernal).
Tal y como explicita el subtítulo del volumen, Viñetas infernales no es sino un repaso a todo un siglo de historietas vinculadas al género del horror en nuestro país, que arranca con los iniciales y muy tibios escarceos con el género allá por 1917, cuando llegan a los quioscos los primeros números de la mítica publicación TBO, hasta cómics tan recientes como las adaptaciones Yo fui guía en el infierno y La torre de los siete jorobados. Entre un momento y otro, se glosan seriales pulp como Los vampiros del aire, personajes inolvidables como el inspector Dan y los inefables Roberto Alcázar y Pedrín, o cabeceras hoy añoradas con nostalgia por sucesivas generaciones de aficionados como Dossier Negro, Drácula, Vampus, Rufus, SOS, Morbo o la incombustible Creepy. En resumidas cuentas, y como no podía ser de otra forma tratándose de un texto de Pedro Porcel: estamos ante una panorámica tan exhaustiva como apasionante de la historia de aquellos que antaño se llamaban por estos lares “tebeos de miedo” y que proporcionaron a sus lectores un primer contacto, y por lo general una experiencia inolvidable, con el terror a lo desconocido y lo sobrenatural.
Pero Porcel también es un experto en cine fantástico, y para acompañar a la proyección de Freaks, la emblemática película de Tod Browning estrenada en 1932, nos ofrecerá una conferencia titulada “El cine enfermo”. Como no podía ser de otra forma, este clásico de los primeros años del cine sonoro, que pese al tiempo transcurrido no ha perdido ni un ápice de su fuerza expresiva y de su capacidad para epatar al respetable público, aparece convenientemente recogido en Cine de terror 1930-1939. Un mundo en sombras, el reciente (e igualmente imprescindible) ensayo que Porcel le ha dedicado al cine del género estrenado a lo largo de los años treinta del siglo pasado.
En sus páginas, el autor observa la evolución del terror durante los primeros años del cine sonoro, empezando por las primeras aproximaciones al Fu Manchú literario creado por Sax Rohmer y otras aportaciones pioneras al género y deteniéndose particularmente en el mítico ciclo protagonizado por los monstruos de la Universal y dirigido por cineastas como James Whale o el propio Browning; pero sin dejar de lado el siempre fecundo horror británico u otras aportaciones de cinematografías menos transitadas como la alemana o la mexicana. Así, el volumen se erige como una utilísima guía a la hora de descubrir joyas olvidadas que el lector no tardará en buscar y visionar para poder contrastar su propio juicio con el del autor. Llegado este punto, es de justicia señalar que el libro que nos ocupa, al igual que Viñetas infernales, está maquetado con un gusto exquisito y cuenta con una cantidad ingente de imágenes que ilustran el texto al que acompañan. Es decir, que ambos libros son una auténtica gozada de principio a fin para los amantes del género, ya sea en la pantalla grande o en la página impresa; y ni que decir tiene que su autor firmará ejemplares de ambos en la jornada del viernes 3.
Para terminar, toca aclarar que Freaks no será la única película que se proyectará en este tercer Fotograma Rojo: ese mismo viernes se podrá ver también El almuerzo desnudo, la muy personal adaptación de la (considerada como inadaptable) novela homónima de William S. Burroughs a cargo de David Cronenberg; y en la jornada anterior el público asistente tendrá la ocasión de disfrutar de Hellraiser, la primera película como cineasta del escritor Clive Barker (que no está muerto, afortunadamente) a partir de su propia novela corta. Una película que, a mi parecer, es el título que cierra la última Edad de Oro del cine de terror a lo largo de un cuarto de siglo; y que será comentada por este su seguro servidor de ustedes con la agradecible compañía del escritor y editor Pablo Vergel.
En resumidas cuentas: de estos dos eventos culturales, tienen todos los datos pertinentes en el par de carteles que ilustran la presente columna. Espero verles a todos allí, el sábado y/o el jueves; y mejor y que o, claro.
La presentación de Quevedo se celebrará en 28 de octubre de 2023 en Ateneo Comics (Alicante); Fotograma Rojo III se celebrará en 2 y 3 de noviembre de 2023 en Centro Cultural Las Cigarreras (Alicante); Quevedo está editado por Cascaborra; Viñetas infernales. Cien años de cómics de terror y Cine de terror 1930-1939. Un mundo en sombras están editados por Desfiladero.