El Volapié

La declaración que no debía ser necesaria

Aunque a la postre haya resultado meramente anecdótico y excepcional, me alegra la noticia de que un concejal socialista –sólo uno que se sepa de entre tantos cargos electos, afiliados y simpatizantes socialistas–, Eneko Andueza, y vasco de Eibar para mayor mérito, haya enviado una carta abierta a Rubalcaba criticando su incoherencia por la posición del PSOE en relación a los toros.
La aprobación a trámite de la ILP para declarar los toros Bien de Interés Cultural es el mayor insulto que hemos podido recibir los que creemos que la Tauromaquia es cultura en estado puro. También debió creerlo así el anterior gobierno socialista cuando transfirió sus competencias al Ministerio de Cultura.

¿Se imagina usted –señor amarillento tirando a rosa– que discrecionalmente un alcalde pudiese aplicar todos los medios a su alcance para prohibir ir a misa? Por ejemplo. ¿Y que sólo lo autorizase un día al año como motivo de la Festividad del Cuerno? Además que esto no fuese por generosidad sino porque de esa decisión se derivase mantener el reparto legal de unos 600.000 euros, en concepto de sueldos para todos los participantes del veto. Encima usando la vía de los hechos consumados y sin arrestos para proponer una prohibición formal.

¿Se imagina –señor intolerante y totalitario marrón– que usted se viese obligado a secundar una ILP para que se protegiese la libertad de culto? ¿Que no tuviera la posibilidad de elegir libremente? ¿Se imagina no poder ir a misa porque al liberticida alcalde de su pueblo no le gustase el olor a incienso?

La Tauromaquia es una rama del amplio espectro cultural de España y así es reconocida mediante multitud de ejemplos desde hace tres siglos, por lo que no hubiera sido preciso todo este lío de no haber existido la intolerancia de aquellos que visten piel de cordero sobre su amarillosidad, pero que gozan saboreando jamón de pata negra y pilotando vehículos de gran cilindrada cuando acuden a las puertas de las plazas de toros para insultar a los que allí vamos a hacer uso de nuestra libertad: Libertad de empresa, derecho a que se fomente nuestra cultura y a no ser discriminados, todo ello presuntamente consagrado en La Constitución.

Esta vergonzosa ILP se ha aprobado sin que los diputados hayan tenido libertad de voto, porque no me creo que todos los del PP sean taurinos y todos los del PSOE indiferentes.

Nada tenemos que reprocharles a estas pandillas los que nos declaramos taurinos en voz alta sin izquierdas ni derechas, porque la Tauromaquia es universal y no tiene más ideología que la del respeto y la recíproca exigencia del mismo.

Pero sí deberían ser reprendidos por quienes van detrás de ellos a las urnas a cambio de casi nada y que son honestos. El PSOE tiene diputados de ambas tendencias, también indiferentes, y entre ellos se encuentran muchos que disfrutan en los toros haciéndose fotos en lugares de preferencia a la par que callan como putas en sus tribunas públicas, politizando y ensuciando la fiesta con su doble moral.

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