Villena lleva tres años sin pagar la piscina cubierta

Preguntado el concejal de Hacienda por el proceso de elaboración de los presupuestos municipales para 2020, que espera tener aprobados “en un Pleno extraordinario a celebrar en febrero”, Juan José Olivares señalaba que estos “incluirán los pagos correspondientes a la piscina cubierta por los ejercicios 2017 y 2018, que todavía no se han pagado”.

Preguntado por tal circunstancia, afirmaba desconocer los motivos, pero señalaba que “por lo visto no se fiscalizaron y no se sabe qué cantidad hay que pagar”, por lo que la cantidad que el ayuntamiento va a presupuestar para el pago será similar a la del ejercicio 2016, el último que se pagó.

Además, y dada esa “falta de fiscalización” durante los dos últimos años de gobierno de Los Verdes, el edil de Hacienda apuntaba que “se está elaborando un contrato con una empresa auditora externa para que dictaminé cuánto dinero debe pagar el ayuntamiento por ambas anualidades”. Al respecto, recordaba que “aunque la empresa reclamó en 2016 un pago superior a los 500.000 euros, finalmente una auditoría externa rebajó esa cifra a unos 360.000 euros”. En cuanto al ejercicio 2019, recién concluido, apuntaba que “la empresa todavía no nos ha hecho llegar la liquidación del mismo”.

Aunque Ciudadanos pedía recientemente una auditoría sobre los últimos 4 ejercicios de la piscina cubierta, Olivares señalaba que la intención del equipo de gobierno de auditar las cuentas era anterior a dicha petición.

Retraso en los presupuestos. Además del dinero de la piscina, el presupuesto deberá contemplar otros pagos no previstos en un principio, como la cantidad a abonar a la SGAE por la música festera, ya que el ayuntamiento dejó de pagarla los últimos ejercicios en tanto se solventaba el pleito entre la entidad gestora de los derechos de autor y la Junta Central de Fiestas.

Preguntado por los motivos del retraso en la presentación de los presupuestos, Olivares apuntaba que “ya estaban cerrados, pero desde Intervención se nos indicó que algunos proyectos que habíamos previsto incluir en las Inversiones Financieramente Sostenibles, que van al margen del presupuesto, no podían financiarse con cargo a esos fondos, y en consecuencia debían incluirse en el presupuesto ordinario, lo que nos ha obligado a modificarlo a última hora”, concluía.