El Gobierno estudia emprender acciones contra las empresas que “repararon” el embalse de San Diego
La construcción está prácticamente inutilizada desde 2011 tras haberse invertido 40 millones de euros en su ejecución
El senador por Compromís Carles Mulet ha manifestado su asombro por el hecho que todavía no se hayan dirimido responsabilidades en otro de los grandes fiascos de la ingeniería española en el territorio valenciano, la construcción de la Balsa de San Diego, en Villena, a la que se destinaron 40 millones de euros para su ejecución.
El papel estratégico de esta infraestructura quedó en nada. De ser la segunda mayor balsa de Europa, concebida con el objetivo de paliar la sobreexplotación de los acuíferos, a convertirse en un enorme despropósito donde nadie tomaba decisiones.
Desde la llegada de Compromís a las instituciones estatales, la coalición ha tratado de obtener del Gobierno información sobre los planes con esta infraestructura en la que tantas esperanzas habían depositado sus usuarios, las iniciativas para su reparación y la exigencia de responsabilidades de los constructores.
“Reclamamos conocer qué responsabilidades se han exigido a los constructores y reivindicamos con enmiendas a los Presupuestos Generales del Estado (PGE) su urgente reparación”, ha manifestado Mulet, añadiendo que “nos encontramos ante otro caso como el de Castor, con muchos millones públicos invertidos y donde las responsabilidades se desvanecen, y eso no es justificable de ninguna manera”.
En su respuesta, el Gobierno ha señalado al senador que “el Ministerio para la Transición Ecológica está realizando la supervisión del proyecto de reparación de la Balsa de San Diego en Villena como fase previa a su aprobación. En este momento, el contratista de las obras no ha aportado el Plan de Adecuación y Puesta en Carga de la balsa”. Por otro lado, le indica que “los servicios jurídicos de la sociedad Aguas de la Cuencas Mediterráneas S.M.E., S.A. (ACUAMED) están analizando las eventuales acciones a realizar para dirimir las responsabilidades que pudieran ser exigibles tanto al contratista como al proyectista de la obra de reparación de la Balsa de San Diego”.
Mulet recuerda que el acuerdo de investidura firmado el 3 de enero de 2020 entre Compromís y el PSOE tenía entre sus compromisos en materia de infraestructuras hídricas la reparación de San Diego. Años antes, PP y Ciudadanos rechazaron en el Senado las enmiendas de Compromís para que los PGE incluyeran dinero para la reparación de la infraestructura. El PSOE también rechazó la enmienda de Compromís para que las cuentas de 2021 incluyeran una partida de 23,8 millones para la reparación. “Están pasando los años, el cambio climático está afectando gravemente a los recursos y la balsa sigue prácticamente inutilizada desde 2011”, concluye el senador valenciano.
Dejadez y falta de supervisión de lo que se hace.