El ayuntamiento “pierde” el local comercial del edificio Carmelitas

El local comercial ubicado en el bajo del edificio Carmelitas, en pleno centro de Villena, está en venta y ya está recibiendo visitas de inversores interesados. Nada extraño, podría pensarse, hasta que recordamos que dicho local fue cedido por la empresa promotora al ayuntamiento a cambio de los permisos para la construcción del edificio.

Tesalia Inmuebles, empresa del grupo CBH, fue la promotora de esta obra, realizada en el antiguo colegio de las Carmelitas y que estuvo siempre rodeada de polémica. Se trataba de una parcela catalogada como “dotacional” en el PGOU, por lo que no podían edificarse viviendas. Sin embargo, promotora y ayuntamiento llegaron a un acuerdo durante el gobierno de Vicenta Tortosa (2003-2007), por el cual el consistorio realizaba una modificación puntual del PGOU de la parcela, cambiándola a “residencial”, y en consecuencia pudiendo construirse viviendas. A cambio, la promotora entregaba al ayuntamiento el local comercial del bajo, un espacio diáfano de unos 400 metros cuadrados que podía ser ideal para habilitar allí instalaciones municipales, pues está a tan solo 50 metros del ayuntamiento.

Con la llegada de la crisis económica todo se complicó. La empresa promotora quebró, dejando el edificio sin terminar, y el inmueble fue embargado por la entidad bancaria que financió el proyecto, la CAM, que posteriormente también quebró, pasando sus activos al Banco de Sabadell. Este lo traspasó con el tiempo a Solvia, su empresa inmobiliaria, que finalmente acabó vendiendo el inmueble a un fondo de inversión, que es el que ahora pretende llevar a cabo la venta.

La sorpresa llega cuando las agencias inmobiliarias de Villena encargadas de la venta, conscientes de la historia de este local, hacen sus comprobaciones en el Registro de la Propiedad, esperando encontrar algún tipo de nota o apunte que certifique la “carga legal” que pesa sobre el local y confirmando la propiedad del ayuntamiento. Sin embargo, no pesa carga alguna sobre el inmueble, por lo que a todos los efectos legales es propiedad del fondo de inversión, que puede proceder a su venta con total tranquilidad.

“Nunca fue del ayuntamiento”

Las fuentes municipales consultadas ahora, ajenas a todo este expediente, han confirmado a EPDV que “el convenio se firmó, pero no llegó a ser escriturado porque se presentaron algunos recursos contra el texto”. Así, “no se hizo valer la situación en tanto no se aclaraban dichos recursos”, y como después se complicó la situación con la crisis y la quiebra de la empresa, pues finalmente el local nunca llegó a ser escriturado como propiedad municipal. De este modo, se entiende ahora que “en realidad nunca llegó a ser del ayuntamiento, porque nunca llegó a escriturarse la propiedad del local”.

De este modo, y pese a haberse dado por hecho en su día, Villena pierde un local que podría venir de maravilla al ayuntamiento, permitiéndole concentrar muchos servicios municipales. Las fuentes consultadas por EPdV señalan que el valor del inmueble en su día rondaba los 400.000 euros, aunque tras la crisis económica y el estallido de la burbuja inmobiliaria será obviamente bastante menor ahora.