Un año más la costa alicantina se tiñe de betún por culpa de Mayo Negro, las jornadas del género de la Universidad de Alicante que bajo el lema que sirve para titular la presente columna alcanzan su 17.ª edición, como siempre de la mano del escritor y periodista Mariano Sánchez Soler y de quien les escribe ahora. Así pues, la cita ineludible de hoy es la de comentarles el programa y las obras que se presentarán en la Sede Universitaria situada frente al paseo Canalejas del 14 al 16 de mayo; esto es, del miércoles al viernes de la semana que viene... como siempre con entrada gratuita limitada al aforo del local.
Esta vez voy a reseñar las lecturas en orden inverso, empezando por la clausura del viernes hasta alcanzar al arranque del miércoles; y empiezo así con un cómic que podría haber sido incluido perfectamente en la selección de la semana pasada sobre adaptaciones literarias. Y es que Soy una asesina es la aproximación gráfica que el madrileño Pedro Arjona ha escrito y dibujado a partir de la novela Desgracias personales del escritor de culto Carlos Pérez Merinero. Los aficionados al cómic y la ilustración más veteranos reconocerán a Arjona como uno de los tres integrantes del colectivo El Cubri -los otros dos fueron el celebrado guionista Felipe Hernández Cava y el dibujante Saturio Alonso-, grupo hoy mítico y fundamental para entender la historieta patria de los años setenta y primeros ochenta que estuvo marcada por su mirada política, su estética experimental y su espíritu underground. Una vez escindido el trío, Arjona continuó su carrera profesional principalmente como diseñador gráfico, ilustrador y realizador de documentales pero sin abandonar nunca del todo el noveno arte; y tras dos colaboraciones con el escritor Jorge M. Reverte se descuelga ahora en solitario con esta espléndida novela gráfica en la que nos ofrece un relato negrísimo -en la línea a la que el malogrado Pérez Merinero tenía acostumbrados a sus seguidores- protagonizado por una mujer que comete un homicidio para librar a una desconocida de una violación inminente. Este encuentro azaroso se complicará cuando se descubra la verdadera identidad del presunto agresor sexual y la protagonista entre en contacto con la viuda de este. El desarrollo de este argumento da pie a un thriller psicológico de atmósfera opresiva marcado por la sempiterna voz en off del personaje principal y el expresivo uso de las sombras y el color. Así pues, y teniendo en cuenta no ya solo los poderosos valores intrínsecos de la presente obra sino el imbatible currículo de su autor, estamos ante una cita ineludible para cualquier amante de la historieta que se precie de serlo.
Justo antes de la charla sobre Soy una asesina contaremos con la presencia de Marta Pérez-Carbonell, profesora salmantina afincada en Alicante que hasta la fecha era más conocida por su faceta académica y muy especialmente por su consideración de experta en la obra literaria de Javier Marías. Pero esta percepción cambió el año pasado de forma generalizada gracias a la publicación de su primera novela: Nada más ilusorio arranca con un tren nocturno desde Londres a Edimburgo, trayecto durante el cual una mujer mantiene una conversación con dos desconocidos sobre sus respectivas vidas. Este suceso en apariencia trivial avivará los propios recuerdos de la protagonista; y servirá a la autora para plantearse hasta qué punto es ético utilizar experiencias reales que se cuentan en conversaciones privadas, así como para reflexionar sobre los siempre permeables límites de la ficción. Sin duda estamos ante uno de los debuts más prometedores de la narrativa patria reciente, que fue vendido a ocho países antes de su publicación aquí, y que ha puesto el foco de atención de crítica y lectores sobre su autora. Si vienen a Mayo Negro descubrirán de primera mano por qué.
La jornada del jueves contará con dos Ricardos, provenientes uno de tierras aragonesas y el otro del País Vasco. El asunto de la geografía es relevante si tenemos en cuenta que uno de ellos, el novelista y divulgador zaragozano Ricardo Bosque (que ya estuvo en la lejana edición de 2012), viene a presentar su libro El lugar de los hechos. Coescrito con el granadino Jesús Lens -que, miren por dónde, también coescribió un libro sobre cine con el autor de estas líneas-, estamos ante un recorrido de medio millar de páginas tan documentado como ameno por la historia del género pero centrado siempre en los lugares físicos en los que se desarrollan sus argumentos. De esta forma, los autores proponen un viaje a lo largo y ancho del globo terrestre deteniéndose en los lugares por los que los lectores han seguido a personajes popularísimos como el seminal Auguste Dupin creado por Edgar Allan Poe, el detective Sherlock Holmes y su fiel compañero Watson, Hercule Poirot, Jane Marple, el padre Brown o el infame Jack el Destripador; y también de otros no tan famosos pero célebres para los aficionados al género como Martin Beck, Nestor Burma, Harry Hole, John Rebus, Tom Ripley, el comisario Montalbano o nuestro Pepe Carvalho: de los castillos de Londres, Glasgow o Dublín a los territorios africanos de Ciudad del Cabo o Dakar, pasando por el Mediterráneo de Marsella, Florencia o Milán; el Danubio de Viena o Berlín; las costas de los países escandinavos, los territorios de la antigua Unión Soviética y la Ruta de la Seda que pasa por Bangkok, Ulán Bator o Beijing. Y ojo, que recogen solo autores desde la letra A (de Adler-Olsen, Jussi) hasta la M (de Manotti, Dominique), amenazando con un segundo volumen. Pues oigan, por mí, encantado.
Antes del encuentro con Bosque, la tarde del jueves la abrirá Ricardo Gómez, autor gallego de nacimiento y vasco de adopción, al que los melómanos conocerán por su faceta de músico de la escena vasca más indie con agrupaciones como Elurretan. Nahiadance o muy especialmente Ciclos Iturgaiz. Pero, lógicamente, es su carrera como novelista la que le traerá a Mayo Negro para presentar su quinto libro: Patria, la buena. Detrás de este provocador título que remite a la celebrada obra de Fernando Aramburu se esconde una novela negra con todas las de la ley, si bien cargada de una ironía socarrona que ya estaba muy presente en su carrera musical. Estamos ante una ficción ambientada en la España de mediados de los ochenta, cuando el Un, dos, tres... responda otra vez que dirigía Chicho Ibáñez Serrador y presentaba Mayra Gómez Kemp era el programa más popular de la televisión de entonces: un concurso a la vez que un espectáculo que reunía a varios millones de españoles frente a sus televisores cada viernes por la noche, y al que en la trama de esta novela se disponen a participar una pareja de etarras que han huido de Hernani para llegar a la capital dispuestos a montar el Comando Madrid. Como podrán suponer, se trata de una mirada nada complaciente pero al mismo tiempo muy satírica a propósito de la felizmente extinta ETA y el terrorismo; así como uno de los descubrimientos literarios más sorprendentes y atractivos de la temporada.
El plato fuerte del miércoles será sin lugar a dudas la visita de la escritora catalana Rosa Ribas. Conocida sobre todo por ser la responsable de la serie policiaca protagonizada por la comisaria Cornelia Weber-Tejedor, así como de la llamada Trilogía de los años oscuros que escribió a cuatro manos con Sabine Hofmann, hace seis años Ribas inició una nueva serie de novelas protagonizada por los Hernández, la familia que actúa como una agencia de detectives ubicada en el barrio barcelonés de Sant Andreu: a las previas Un asunto demasiado familiar, Los buenos hijos y Nuestros muertos les sucede ahora la recién publicada cuarta entrega de la saga, Los viejos amores, donde la familia protagonista se verá las caras (más o menos) con un avaricioso cibercriminal que se hace pasar por un antiguo compañero de colegio de sus víctimas. Gracias a estos personajes, la autora pone de manifiesto una lacra social tan presente hoy como la soledad, y cómo esta se ceba particular y cruelmente con las personas mayores. Estamos pues ante una muestra más del talento narrativo de Ribas, ya un nombre fundamental de la novela policíaca española de nuestro tiempo.
Y como ya me queda poco espacio me limitaré a decir que estos cinco títulos recomendados hoy no son los únicos que se presentarán en este decimoséptimo Mayo Negro: a modo de telonero de lujo de Rosa Ribas contaremos con la presencia de Urbano Colmenero, aficionado irredento al noir y asiduo visitante de multitud de festivales del género (Mayo Negro incluido, claro), que tras ganar el primer premio en el Concurso Internacional de Relatos “Bruma Negra” decidió dar el salto a la novela con Serenata de grillos. Estamos ante un relato criminal a medio camino entre Madrid y un pequeño pueblo turístico del sureste peninsular al que llega un investigador privado empujado por su psiquiatra con el fin de librarse de una fuerte depresión; un lugar aparentemente tranquilo pero en el que aquel descubrirá que ni siquiera en una pequeña villa alejada de la capital como aquella puede librarse del mal que anida en el corazón de los hombres... El resultado es una novela en la que, en palabras del propio autor manchego, “en contra de la mayoría, todo es lo que parece”. Además, aprovecharemos el acto de inauguración de las jornadas para dedicarle unas palabras a El leñador, la nueva novela de Mariano Sánchez Soler sobre la que no necesito extenderme más porque ya se la he recomendado antes con fervor. En resumidas cuentas: así será el nuevo Mayo Negro de este 2025. Así pues, espero verles dentro de nada en compañía de algunos de los autores nacionales más relevantes del género ahora mismo.
Mayo Negro XVII se celebra del 14 al 16 de mayo de 2025 en la Sede Universitaria Ciudad de Alicante (Avda. Ramón y Cajal, 4); Soy una asesina, Nada más ilusorio, El lugar de los hechos, Patria, la buena y Los viejos amores están editados por Reino de Cordelia, Lumen, Cazador de Ratas, Autsaider y Tusquets respectivamente.
